domingo, 11 de mayo de 2008

SHIT HAPPENS! el Bartolo saliendo de Cancun

Estamos en la carretera hacia Tulum. Han pasado pocos momentos desde que tuvimos un leve accidente automovilistico. Es curioso que acabamos de pasar una senalizacion que decia “despues de un accidente ya nada es igual”.

Habiamos pasado a revisar la presion de las llantas a una bomba de bencina y hubo cambio de turno para conducir. Salimos de Cancun hace como media hora. Mi papa venia conduciendo mientras con Gustavo nos poniamos al dia; las peliculas que ibamos a ver, los temas acerca de Margaritas en la playa, el conicerto de Santana que le recordaba a mi papa los anos universitarios ahi a principio de los 70. Por supuesto ibamos mandandonos unas chelas y visiblemente veniamos euforicos, era nuestro primer encuentro en el Bartolo. Gustavo se puso al volante despues de revisar la presion. Como hace un calor de la puta y los asientos son de cuerina café, el sudor hace que todo sea mas incomodo. Dicen que los accidentes pasan en un segundo y asi fue, tuve la suerte de ver toda la secuencia. Iba al lado de mi hermano cuando le dijo a la Fena “poneme una toalla en el asiento porfa?”. En ese momento le pasamos la toalla playera, la baja por su espalda y para ponerla en su trasero pierde de vista el ardiente pavimento. Es ahi cuando pasamos raspando tangencialmente un bus de turistas espanoles Autotur; yo iba del lado en que se raspo y alcanze a ver la secuencia de rostros que pasan por la rejilla atrapa mosquitos. Todos atinamos a cubrirnos la cabeza. Gustavo siguio manejando confudido aun por lo sucedido y lo unico que atina a decir es “esconde las chelas y pasame un chicle!”. Este hueon tiene know-how en accidents de transito: se ha dado vueltas campanas en jeeps ahi por Ritoque, en un mini rajao cuando fue su graduacion de colegio “Lo hizo mierda!” decia mi papa.



Nos detuvimos unos 200 metros mas adelante para arreglar el asunto con el schumager mexicano. En ese momento, saco la camara para tener registro de todo lo acontecido y Paulito me dice serio “esto no es hueveo hueon, para con la camara”. Ahi me di cuenta que hay dos tipos de personas en estas circunstacias: los que ven los accidentes con el filtro de “lo serio” y los que lo ven como “cosas que pasan”. Y como el registro es impersonal y no censura, empece a grabar. Sabiendo que no tenia mucha bateria, capte los reclamos de mi papa contra el descuido de mi hermano, cual Pitoniso decia “lo veia venir hueon, lo veia venir”. Segun el la sacamos barata porque este vehiculo esta hecho enteramente de fibra de vidrio; en el caso de que hubiese sido una colision multiple, un camion a las velocidades que pasan por esta carretera nos hubiese partido en 2 facilmente. Pero es solo ficcion, en momentos como estos, la gente tiende a imaginarse su eventual muerte con espectacularidad.

Segui con mi registro de lo ocurrido, cruce la carretera con cuidado con mi papa para grabar el lado del bus que fue afectado. En ese momento me doy cuenta que los turistas espanoles del bus se estaban comunicando con nosotros. Saludaban a la camara y con gestos me decian que no habia problema, solo fue el susto le decia golpeandome mi enrronchado pecho chileno. Ahi dije, esta es la mia, voy a subirme al bus y registrar a los espanoles en este momento de distencion accidental. Cruce el asfalto y grabe a un moreno espanol que se habia bajado a echar la talla con Paulo. Subo al bus con el y veo de primeras a un gringo con cara de que este hueon aprovecho el panico y me va a robar mi camara. La esposa del espanol estaba cagada de la risa y decia que no pasaba nada. Me acorde de esa peli Babel donde todos se relacionan porque se ven envueltos en eventos accidentales. Un accidente feliz al fin de cuentas. Hacia el fondo del bus se ponia mejor la cosa: unas espanlolitas masomenos y unos espanoles con cara de rugbistas se reian de mis dotes director al peo y humorita improvisado, era mi stand-up rutero. Tenia la atencion de todos cuando les relataba nuestra version de lo sucedido y la aventura que estaba empezando para nosotros. Era un encantador de serpientes y las serpientes se despedian con un “adios Steven, adios”, obviamente por mi facha de barbon hawiano, clasica del director gringo.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

jajajjajajajajaja, GRANDE BLOB!

Anónimo dijo...

dear blob,

nada mas q manifestarte mi mas enferma envidia desde el fondo del corazon...jajajaja
nada mas

manda fruta

deva dijo...

"cosas que pasan"...es como escucharte hablar.....jajaja

un beso.